La Declaración de
Ultimatum del pueblo de Vieques a la Marina de los Estados Unidos, de fecha 31 de
julio, expresa textualmente: El pueblo de Vieques, con el apoyo unánime de todos
los sectores del gobierno Puerto Rico, exige a las fuerzas militares de los Estados Unidos
en Vieques, Puerto Rico, que cese todas las prácticas de guerra, ejercicios y otras
actividades en forma permanente; la inmediata partida de todo su personal, equipamiento y
artefactos de la municipalidad de la isla; y el retorno de todos los territorios
actualmente ocupados por cualquier repartición o departamento de las Fuerzas Armadas de
los Estados Unidos a la Municipalidad de Vieques.Proclamamos nuestro derecho
inalienable de construir un futuro de paz y bienestar y continuar la lucha histórica y
heroica que por más de seis décadas ha tenido lugar, sin respiro, para acabar con el
abuso de la Marina de Estados Unidos en Vieques.
Reafirmamos el compromiso de la gente de Vieques y de todos los puertorriqueños de
apoyar el derecho de nuestros pescadores y pescadoras para defender los recursos de
nuestro mar.
Acusamos a la Marina de Estados Unidos de contaminar nuestro aire, agua y tierra,
contribuyendo al alto nivel de cáncer y otras enfermedades vinculadas a la degradación
del medio ambiente que están afectando a nuestra población.
Hacemos responsables a las actividades militares durante estas seis últimas décadas
de la muerte, heridas, enfermedades y del profundo daño psicológico causado a nuestros
niños y niñas.
Deploramos el uso de uranio reducido, bombas napalm y otras armas químicas y tóxicas
condenadas por la opinión pública debido a su impacto adverso sobre la salud y el medio
ambiente.
Exigimos al gobierno de Estados Unidos que limpie la isla Vieques de todos los
materiales tóxicos y de deshecho, así como que descontamine todas las áreas usadas para
las prácticas militares, incluyendo la remoción y desactivación de las bombas y
municiones.
Acusamos a la Marina de los Estados Unidos de castigar el sano desarrollo de nuestra
economía, obligando a nuestra gente a emigrar en búsqueda de trabajo y bienestar con el
forzoso resultado de la desintegración familiar.
Exigimos al gobierno de los Estados Unidos la justa indemnización por el uso de la
tierra, el daño causado a la población de Vieques y a su medio ambiente así como el
costo de la descontaminación de todo su territorio.
Declaramos que la Marina es una entidad usurpadora de nuestro territorio y que con su
presencia violaron los derechos naturales del pueblo de Vieques de disfrutar nuestros
recursos naturales y nuestro derecho a la paz.
Si la Marina no responde a las demandas de nuestra gente, declaramos que la intención
de todo el pueblo de Vieques y de millones de puertorriqueños solidarios en todo el
archipiélago y en los Estados Unidos, es la de participar y apoyar todos los actos que
llevemos adelante dentro y fuera de los territorios restringidos por las fuerzas armadas
de Estados Unidos en Vieques.
Responsabilizamos al gobierno de Estados Unidos por cualquier daño o lesión que pueda
sufrir cualquier puertorriqueño en el ejercicio de su derecho de defender su tierra.
Es más, declaramos que la represión o arresto no debilitarán la determinación del
pueblo puertorriqueño-viequense de rescatar de las manos de la Marina de los Estados
Unidos su patrimonio territorial, el que le pertenece por derecho histórico y natural al
pueblo de Vieques.
Esta declaración de Ultimatum será entregada a los oficiales militares en Vieques, al
presidente de los Estados Unidos, a las Naciones Unidas y al Gobernador de Puerto Rico.
Aprobada por la Asamblea del Pueblo de Vieques, celebrada el 31 de julio de 1999 en
Vieques, Puerto Rico.