Fisiología del ejercicio
aplicada al niño
Cuando enfrentamos la bibliografía
que refiere al organismo humano y su respuesta frente al esfuerzo físico,
nos encontramos casi siempre que la mención de las mismas se refiere
al individuo adulto y por lo general a los deportistas. Así sea para
adaptarse al ejercicio simple u ocasional o al ejercicio regular, el niño
- como el adulto - experimenta cambios fisiológicos particulares.
Respuestas metabólicas
El metabolismo aeróbico
El VO2 Max. (Consumo
máximo de oxígeno) refleja el nivel del metabolismo aeróbico
y su reconversión de energía. El VO2
Max. en valores absolutos (lts. min.) aumenta con la edad sin grandes diferencias
entre ambos sexos hasta los 12 años aprox., a partir a aquí
los varones marcan un aumento comparativamente mayor que niñas .
El aumento se mantiene en los varones hasta los 18 años y en las
niñas hasta los 14 años.
De acuerdo a esto la potencia aeróbica absoluta esta menos desarrollada
en los niños que en los jóvenes y adultos. Lo que sucede es
que el niño, cuya masa corporal es pequeña, no necesita un
elevado VO2 Max. Absoluto.
Por ésta razón para poder
comparar la Máxima Potencia Aeróbica entre individuos que
difieren en su masa corporal, es necesario expresar el VO2
Max. en valores relativos, o sea en relación al peso corporal ( ml.kg.min.
)
El VO2 Max. en valores
relativos, no varía casi nada en los varones, pero disminuye continuadamente
en las niñas fundamentalmente a partir de la pubertad. Esta caída
en las niñas debe atribuirse, entre otros factores, al incremento
de la grasa corporal que se aprecia en ellas con el paso de los años.
Las diferencias entre ambos sexos, se hacen
mínimas si comparamos el VO2 Max. en relación
a la masa corporal magra, lo que nos confirma el concepto anterior.
Otro aspecto importante es el estudio de
la Eficiencia mecánica en relación al VO2
Max. El costo de la marcha y la carrera es mayor en los niños expresado
en valores relativos. Cuanto más jóvenes mayor es el costo
del ejercicio, lo que refleja como concepto un aumento en la economía
del movimiento a partir del desarrollo.
Con estos elemento aparecen contrapuestas
2 variables, por un lado el alto VO2 Max. en valores
relativos y por otro el alto costo metabólico de la marcha y la carrera.
El ejercicio regular disminuye el costo energético del esfuerzo,
o sea aumenta la eficiencia mecánica.
Si tomamos la diferencia entre el VO2 Max. y el VO2 necesario para la realización
del ejercicio, representamos la Reserva Metabólica. Y es aquí
donde los niños se encuentran en desventaja. Por ejemplo, si tomamos
una intensidad de carrera de 180 mts. por minuto, vemos que un niño
de 8 años trabaja al 90 % de su VO2 Max. , mientras uno de 16 años
- para la misma intensidad - trabaja solo al 75% de su VO2 Max.
Este es uno de los elementos para explicar
la menor capacidad de los niños sobre carreras de resistencia de
larga duración. Podemos decir que metabólicamente los niños
pueden mantener una carrera lenta por un tiempo importante, pero generalmente
su nivel de concentración no se los permite.
En los niños las enzimas Oxidativas
trabajan mejor que las glucolíticas, presentando similar capacidad
que los adultos en cuanto al reclutamiento de fibras tipo I (Ia y Ib) y
también al volumen mitocondrial. Incluso pueden tener mayor número
de mitocondrias y del conjunto de componentes enzimáticos oxidativos,
lo que determina una posibilidad de mayor aprovechamiento de los ácidos
grasos libres en relación a los adultos. (Bell, Mac Dougall, Billeter,
Howald, Weiss, 1981).
El metabolismo anaeróbico
La capacidad de los niños de trabajar
en forma Anaeróbica es sensiblemente menor a la de los adolescentes
y a la de los adultos. Por ejemplo, la potencia Anaeróbica generada
por un niño de 8 años es el 70% de la que puede generar uno
de 11 años.
Una serie de características bioquímicas fundamentan ésta
condición, donde se destaca un menor nivel de reservas de Glucógeno
y fundamentalmente una menor capacidad enzimática glucolítica
( PPK, PDH, LDH )
Si comparamos la potencia Anaeróbica
alactácida con la lactácida - ambas componentes de la potencia
Anaeróbica - apreciamos una diferencia de comportamiento entre ambas.
Desde el punto de vista metabólico el niño puede realizar
esfuerzos de breve duración y alta intensidad , no siendo otra cosa
que el modo natural de jugar, expresado por una alta potencia alactácida
similar a la de los adultos y con una alta entrenabilidad.
Mientras que la energía para el trabajo intenso y prolongado es
muy limitada debido a las pobres condiciones enzimáticas y de los
sustratos de la vía metabólica lactácida. A lo que
se agrega que su estimulación temprana es inútil debido a
la falta de predisposición metabólica-enzimática, expresada
en la baja capacidad de producir lactato.
Niños de 5 a 6 años presentaron
un 50% de la función de la LDH en comparación con sus valores
10 años después. (Haralambie)
Si observamos la transición aeróbica-
anaeróbica y la deuda de oxígeno, vemos que los niños
tienen una transición hacia la fase estable más corta que
en los adultos. Si lo expresamos numéricamente los niños necesitan
2 minutos para alcanzar la fase estable, mientras los adultos necesitan
4 minutos. Este menor tiempo de transición determina que el niño
no necesite "hechar mano" importante a la vía glucolítica.
Pero además, es lógico pensar
que un cuerpo pequeño puede abastecerse más rápido
de oxígeno que uno grande.
Respuestas cardiovasculares
El gasto cardíaco ( Q ), para iguales
VO2 , es algo menor en los niños que en los adultos. El gasto cardíaco
máximo es menor en valores absolutos en los niños más
pequeños, lo que determina una disminución del poder transportador
de oxígeno que se encuentra compensado en parte por una mayor capacidad
de extracción del mismo.
El volumen sistólico ( V.S. ), es
marcadamente menor en todos los niveles de ejercicio. Para iguales VO2 Max.
los más jóvenes tienen corazones más pequeños,
lo que es un factor determinante del menor volumen sistólico.
Esto nos confirma una mayor diferencia arteriovenosa
de oxígeno ( dif. A-v O2 ) como expresión de una capacidad
de extracción de oxígeno aumentada.
La Frecuencia cardíaca ( F.C. ) compensa
en parte el bajo volumen sistólico, ya que es siempre mayor, en todos
los niveles de ejercicio. Los valores máximos de la misma disminuyen
casi 1 ciclo por minuto al año. Los valores submáximos también
declinan con los años lo que representa el aumento de la llamada
Reserva cardíaca.
El mayor Flujo Sanguíneo Muscular
en los niños representa una más favorable distribución
de la sangre durante el ejercicio. Esto facilita el transporte de oxígeno
al músculo activo y junto con el aumento de la diferencia arteriovenosa
de oxígeno compensa el bajo gasto cardíaco.
El comportamiento de la presión arterial
(P.A.) muestra valores sensiblemente menores para edades menores. En ejercicios
dinámicos la P.A. sistólica aumenta en relación al
aumento del gasto cardíaco y la frecuencia cardíaca, mientras
la diastólica se mantiene debido a la baja resistencia periférica.
En ejercicios estáticos la P.A. sistólica y diastólica
aumenta en relación directa al grado y duración del esfuerzo.
El niño activo aumenta su volumen
cardíaco, ya que sigue las mismas leyes adaptativas que el adulto,
el ejercicio aeróbico en el período prepuberal estimula el
aumento de la red vascular periférica, lo que determina que en los
años sucesivos la sobrecarga presora sea menor. El trabajo cardiovascular
aumenta predominantemente sobre la base del aumento predominante de la frecuencia
cardíaca sobre el volumen sistólico, con una baja eficiencia
cardíaca.
Alcanzan con facilidad frecuencias de 200
o más ciclos por minuto, con curvas ascendentes y descendentes del
pulso de comportamiento similar a las de los adultos. Esta diferencia en
el comportamiento del pulso se debe a un predominio del sistema simpático
adrenérgico, factor determinante de sus elevadas frecuencias cardíacas.
Con el entrenamiento aeróbico los
niños están capacitados de manera similar a los adultos en
cuanto a:
· Incrementar el Consumo de oxígeno
en valores relativos.
· Incrementar la silueta cardíaca
· Reducir la frecuencia cardíaca
para igual esfuerzo submáximo
Los niños pueden incluso llegar a
un VO2 Max. de aproximadamente 70 ml/kg/min., magnitud
que poseen los buenos fondistas adultos (Keul, 1982) Esto no significa que
niños entrenados presenten iguales rendimientos que los adultos ya
que su menor contenido de hemoglobina, su ineficiencia cardíaca,
su estructura mecánica pequeña y su porcentaje menor de masa
muscular, marcan diferencias absolutas importantes.
Respuesta respiratoria
La respuesta al ejercicio en los niños
es similar ala de los adultos, con algunas diferencias cuantitativas.
La Ventilación Pulmonar (VE) máxima,
en valores absolutos aumenta con la edad y en valores relativos es igual
en adultos, jóvenes y niños. La VE submáxima disminuye
con la edad, lo que sugiere una menor Reserva Ventilatoria en las edades
infantiles.
La VE y el VO2 aumentan
linealmente hasta el punto del "breaking" respiratorio donde la
VE se acelera marcadamente, determinando una elevación del Equivalente
Respiratorio debido a tener que aumentar la cantidad de litros de aire movilizados
por cada litro de oxígeno consumido.
Si analizamos el comportamiento del Equivalente
Respiratorio, el niño presenta una ventilación antieconómica,
ya que debe mover más aire por litro de oxígeno consumido.
Comparado con adultos y adolescentes, los
niños responden al ejercicio con una alta Frecuencia Respiratoria
( F.R.) y una ventilación superficial.
La volumetría pulmonar nos muestra
un conjunto de parámetros que están directamente relacionados
con las dimensiones corporales. Por ello no podemos decir que - para iguales
dimensiones - el niño activo tiene pulmones más grandes.
Sin embargo los niños activos poseen
volúmenes pulmonares más elevados , lo que no representa una
contradicción, sino que se refiere a que el niño activo posee
una mayor coordinación neuromuscular que determina un mejor uso del
diafragma.
A la fisiología del ejercicio aplicada al
niño le falta aún camino por recorrer, esperando resultados
de numerosos estudios longitudinales en proceso, que nos darán una
valiosa información para el desarrollo futuro de la educación
física y el deporte infantil.
Recopilación: Prof.
Gabriel Molnar
Materiales de referencia: Wilmore
& Costill y Oded Bar Or. |