TODOS A PADECER (2)

- CUMPLIMIENTO
- PRIMICIAS QUE ALEGRARAN LOS CORAZONES
- TODOS SON MIS NIÑOS
- EN EL CIELO SE OFRECIERON POR AMOR



Montevideo, 29/07/89

CUMPLIMIENTO

Mi Señor. .. .

Cumplimiento es este, alma mía,
como lo que acabo acá de anunciar,
Cumplimiento que fue a pedido vuestro,
así como se ofrecieron, quisieron también cumplir.
YO no quería verlos destrozar,
pero ustedes se impusieron.
Y ahora YO por respeto, debo dejar hasta el final.
Que se realice todo el Cumplimiento,
y estamos.. ..

en la última pequita, mi Señor, me estás mostrando la última pequita y luego es la Purificación total!....

YO no te dije nada, solo te mostré -dice EL-
­te adelantaste a mi Palabra....

Perdóname si hice mal, mi Señor. Pero una pequita ¿cuánto tiempo puede llevar todavía? ¿cuánto mi Señor, puede llevar esa pequita?

No te inquietes -dice EL­
mira, cómo el tiempo ha corrido,
fíjate lo que ya se habló,
de esto que es la parte del Apocalipsis,
cuántas veces lo he repetido.
¿Saben que ya está cumplido?
¿Qué falta? ¿algo en Turquía?
Irán, Irak, Siria ya están,
y lo que falta...

Sí, mi Señor, pero Turquía también ya está un poquito convulsionada. No sé si habrá algo distinto, que no sea una conflagración, ahí, no a nivel mundial, sino ahí, entre esos cuatro, los cuatro del río Eufrates.
Pero estos días TU me hiciste sentir, mi Señor, como que en Turquía puede haber algo. Que no lo veo como un enfrentamiento, lo veo de otra naturaleza, no sé. A ver... ¿hay volcanes en Turquía? yo no lo sé, mi Señor. No me respondas tampoco, ya no quiero ni saberlo. Ya me da miedo.

Estamos al final de los Tiempos y de todo el Cumplimiento,
pero en Cumplimiento también es,
aquello que aquellos otros hijos pidieron,
que en vuestras manos esté el realizar lo Divino,
y ustedes lo harán, porque también es un Cumplimiento.
Respondiendo a aquel arrepentimiento ya aquella gratitud,
pero ustedes no tendrán orgullo porque dirán:
que ellos también despierten y salgan de su esclavitud.
Amén.



03/08/91

PRIMICIAS QUE ALEGRARAN LOS CORAZONES

Lucifer y qué más?... Noticias, confusión, viaje.

Otra vez tus caminos, mi Señor. Y veo quien está preparando, proyectando un viaje. Más de uno está proyectando un viaje. Hay quienes están para enviar noticias y otros que están aguardando y miran para recibirlas. Hay quien camina y camina deambulando ¡qué confusión! y hay quien está allí, golpeando con un pico, golpeando con un hacha, derribando árboles. Mi Señor... ¿por qué?

Este tiempo el que se anunció
de Caos y de Confusión
pero las noticias que muy pronto llegan,
ya no serán las noticias
tan humanas, tan de la Tierra,
sino que serán las primicias
que alegrará cada corazón.
Cuántos como Luciferes han tenido que actuar,
para decir: yo no puedo ser juez de nadie,
porque yo he actuado igual.
Por lo tanto, mis benditos,
a no temer ya jamás,
que estos viajes que están preparados,
estas estrella que se vienen acercando,
estos ángeles que los irán guiando,
los elevarán hasta ese verde de la pradera,
ese que destruyendo está,
ese que lo derriba todo
con hacha o con pico,
que como un Lucifer está.
Vuestras almitas también se han ofrecido,
¿qué dije cuando aquello ocurrió?
Cuando mil años antes
de la llegada de mi Jesús
los Profetas lo venían anunciando,
noticias que venían llegando,
el viaje que se verificó.
El viaje... y tantos seres,
a través de los desiertos,
peregrinos, aquellos reyes,
pastores que llegaron a Belén,
también fueron viajes
que debían realizar.
Pero si mil años antes
aquella llegada se anunció,
ninguno quería ser Judas,
ni Pilatos, ni Herodes,
porque en todos había amor,
y sin embargo se ofrecieron,
y como luciferes debieron de actuar,
pero el alma estaba desgarrada
por lo que en aquel cuerpo
debían realizar.
Por lo tanto,
cómo voy a ser juez de mis hijos,
si en cada uno hubo gran dolor.
Pero muy pronto habrá nuevos viajes,
no solo serán estos, los de ahora,
los terrenos, los que realizarán.
Las noticias que están esperando,
que muchas cosas se van a aclarar,
la confusión que se vive
y luego, todo diafanidad.
A no temer, mis benditos,
a no temer, y a esperar,
que el tiempo se va abreviando,
todo se va acelerando,
todo será cumplido.
Se sentirán firmes y seguros, hijos míos,
y entonces las noticias de ustedes partirán:
el Cristo ha llegado,
¡vamos! no hay que temer,
tenemos que viajar,
vamos a abrazarlo.
La confusión se va a terminar,
Y ¿quién será Lucifer?
Ninguno, si YO no voy a destruir,
todo lo transformaré.
Que aquello que se destruyó
como el Templo de la Antigüedad
será totalmente recuperado,
renovado, divinizado,
porque los hice como Soy YO,
divinos también en el Cielo
para venir a la Tierra,
así como humanos,
como se ofrecieron,
como se autodestinaron,
tantas veces así lo mencioné.
Pero también están destinados
para la Gloria que acá comienza
y ya no se quebrará jamás.
Amén


07/09/91

TODOS SON MIS NIÑOS

Todos son mis niños
el tiempo no pasará,
son mis niños que llegaron del Cielo,
son mis ángeles de ternura y paz,
mis ángeles que se ofrecieron,
así como tantas veces mencioné.
Esas hostias...

Mi Señor, me estás mostrando, veo una hostia y veo a cada uno con sus brazos abiertos y sus manos así, otras como en una plegaria, otras como en una Bendición, otras como extendiendo las manos donde deben apoyarse.
Para MI siempre son niños,
pero en cada uno está la fuerza del Amor,
así como hostias que salieron de allá,
ese Tabernáculo que vacío quedó,
así vinieron y se sintieron destrozar.
Pero cada uno, para ese destruir,
también cada uno su cabeza inclinó.

Ay! mi Señor, no me vayas a mostrar la gillotina, por favor, porque es como sentirla...!
Así también han padecido,
vuestras almas que son de Eternidad,
de distintas maneras se han revestido
para pasar por todo,
tal como en una canción que han escuchado,
así también hijos míos se ha vivido.
Se ofrecieron para luego no juzgar,
no levantar la mano y decir:
tu hiciste aquello y yo
no me contaminé jamás,
sino decir: todos en todo estuvimos,
y en un abrazo de maravilla
que se verificará,
sentirán que por fin
todo lo han cumplido, lo han realizado,
y ha sido por el Amor inmenso,
amor también a aquellos hermanos,
a aquellos hijos míos,
que en el Cielo se habían opuesto,
y algo más habían querido.
Pero como todos son mis hijos,
todos mis niños son,
a ninguno YO aparto.
Vengan todos a mis brazos, y pueden mirar,
están todos en mi corazón.
Amén


Montevideo, 29/05/93

EN EL CIELO SE OFRECIERON POR AMOR

Acá tu bendita hija dice..... retirada de los negativos ante el triunfo inminente de la Justicia. Mi Señor, querido, TU y tu infinita paciencia y bondad, eres maravilloso. Bueno, ahora ¿qué vas a responder?
La respuesta no es solo para ti, hija mía bien amada -dice EL-
Y lo veo ahí, inmenso, como siempre.
La respuesta es para todos mis hijos
y todos podrán comprender.
Está el triunfo, sí, el triunfo,
el triunfo en vosotros, en cada uno de ustedes,

Mi Señor, pero cuando dices ustedes me muestras una muchedumbre inmensa, no me muestras solo los que están acá....
Por supuesto que YO hablo a todos mis hijos,
el triunfo está en ustedes,
se ofrecieron en venir a pasar todos los momentos,
todos los infortunios, todos los tormentos, martirios también.
Fueron amigos y fueron enemigos,
fueron positivos y fueron negativos,
el alma vuestra que está en vuestro cuerpo,
el alma es la Eterna,
y el cuerpo, no deben olvidar,
es el vestido con que el alma se ha vestido,
en estos tiempos, en distintos momentos
se ha cambiado de ropa,
pero el alma siempre es la misma,
la que se ofreció a padecer en todo,
en ser amiga y en ser enemiga.
Pero en el Cielo todos son hermanos
y a nivel de almas siempre se están tendiendo las manos,
cerrando el gran abrazo,
aunque como humanos quieran cumplir,
yo te odio....... yo te amo..........
Así es, el lenguaje humano y el lenguaje divino al mismo tiempo,
se agreden, se ofenden, como en aquel calvario,
cuando aquel Hijo Mío por todos se ofreció,
que quería ser el solo el que sufriera y con tanto amor,
necesitó de sus hermanos,
del que lo traicionara, del que lo entregara,
del que lo clavara, de todos precisó.
Si a nivel de cuerpos esto fue horrendo,
a nivel de almas era atroz el desgarramiento,
y sabían que tenían que cumplir.
Ninguno quería hacer aquella parte junto a El, ninguno,
y sin embargo, desde la Antigüedad en el Cielo,
mis hijos se ofrecieron por ese amor inmenso,
como lo hicieron ustedes también.
Y muy pronto es el gran triunfo,
por fin después de tanto sufrir,
vuestras almas desgarrándose de continuo
llega el momento divino
y en vuestros cuerpos sentirán la alegría de decir:
¡hemos llegado al final del dolor,
ahora nos podremos abrazar,
ya no habrá enemigos, no habrá nada negativo,
sino por fin la gloria, lo positivo, hermanados todos,
en estos senderos, de ternura, de comprensión,
de esta consagración que en el dolor llega a su final
para estar nuevamente consagrados
en ese Amor Divino como ángeles,
con las alas entrelazadas y tomados de la mano,
así el doble abrazo entre todos
y en esos brazos los Míos, como siempre, no pueden faltar.
Son mis hijos y los amo,
jamás condené a ninguno, jamás!
No lo deben olvidar,
si hubiera condenado a uno solo,
YO me sentiría desgarrar.
Créanme, sí, así es,
no soy el verdugo
que me han presentado en tantos momentos, ¡no!
Y van a cambiar muchas de las palabras
con que se ha dicho de MI,
que soy un tirano, que soy el juez,
que estoy censurando y que estoy en un trono,
ninguno pasará por aquí,
sin antes rendir cuentas de lo que ha hecho.
¿Qué cuentas? Si todo YO lo sé.
No soy verdugo, no, tesoros míos,
soy el Papá del Cielo que a todos ama y comprende,
han tropezado, si YO también tropiezo,
han empujado, me sentí empujar,
pero YO beso las manos,
no lo deben olvidar.
Amén


Ir a página siguiente (3)
Volver a página anterior (1)
Volver a índice "Todos a Padecer"
Volver a índice de Dios
Volver a página de Entrada