MENSAJES DIVINOS:
6. DUDA
Dudas que serán aclaradas,
signos de interrogación que se transformarán,
signos de interrogación como en caminos divinos,
porque serán luces que se extienden,
y dudas no tendrán jamás.
Que ahora sé como te encuentras,
pero digo, no, ¡Vamos , adelante mi bien!
Mira a lo alto pero no es con orgullo,
mira a lo alto, porque eso es demostración de fe.
Mira dentro de ti y puedes comprender tu proceder,
es limpio, es puro, lo sé,
aunque a veces tú te digas:
como humano, si tropecé.....
No te inquietes, alma mía,
que contigo Yo también caí.
Cómo he de censurarte,
Yo no aflojo mi mano,
sino que digo, ¡Vamos!, vamos , hijo amado,
no temas, necesario todo fue,
para que conociendo el dolor y la amargura,
puedas así ayudar a otros:
a quién está lleno de dudas,
puedas aclararlas también,
a quién vacila y no sabe continuar, le dirás:
¡Vamos! Dame tu mano que te voy a ayudar.
Y a quien se encierra en una agonía,
o en un dolor, le dirás:
levanta tu rostro, mírame a mi, ¿Qué ves?
Y te dirá : que has sufrido como yo.
Efectivamente, así es, ¡Vamos! No te abatas,
que fuerzas del Cielo, Dios en ti pondrá,
porque es cierto, hijo, es cierto
fuerza de Cielo pondré,
da con firmeza la palabra,
que no te defraudaré,
y no te sentirás decaer jamás.
AMEN
(30 /12/1987)